Narrado por Liam Neeson, este documental, disponible en tres partes o como una película de 85 minutos de duración: identifica los orígenes de la rebelión de 1916 en los movimientos independentistas de finales del siglo XVIII. Tanto la Guerra de Independencia de Estados Unidos como la Revolución Francesa ayudaron a sentar las bases del deseo de las naciones colonizadas de liberarse del yugo imperialista y atacar por su cuenta.
En Irlanda, este espíritu fue alimentado por la percepción de que el gobierno británico no estaban realmente interesados en su bienestar. Esto fue especialmente evidente durante la hambruna de la papa de las décadas de 1840 y 1850, cuando miles de personas murieron o emigraron a los Estados Unidos. Una vez que llegaron allí, se sintieron imbuidos por el espíritu de «poder hacer», que les ayudó a fortalecer el movimiento hacia la independencia.
El documental de Ruan Magan contó una historia familiar, una ya contada en varios programas transmitidos con motivo del centenario. aniversario del levantamiento. Lo que lo distinguió de los demás fue el uso de fascinantes imágenes de archivo más entrevistas con algunos de los protagonistas que estaban allí en ese momento. Escuchar recuerdos de primera mano nos hizo conscientes de cómo se veía la Rebelión: Para los nacionalistas irlandeses representó una oportunidad para hacerse valer, pero para los ciudadanos comunes se consideró como una imposición innecesaria, especialmente cuando tantas personas murieron como resultado del conflicto.
Al igual que con muchos documentales, EASTER 1916 contenía una gran cantidad de opiniones de expertos de académicos de Irlanda, Estados Unidos y Gran Bretaña. Si bien ofrecieron puntos de vista mordaces y a menudo articulados, la impresión predominante de este documental fue la imp ortografía de la Rebelión como una revuelta «de abajo hacia arriba»; la expresión de la voluntad de la gente corriente. La reacción de los gobernantes británicos – ejecutar a todos los líderes lo antes posible – fue percibida como excesiva y tuvo el efecto de incrementar el apoyo a los rebeldes.
La Rebelión fue una de las primeras entre las colonias de Gran Bretaña, y ayudó a allanar el camino para los movimientos independentistas en todo el mundo. Eso representa su verdadero significado históricamente; el evento marcó el comienzo de una nueva visión de la historia en la que los gobiernos no dependían de una potencia extranjera sino del pueblo mismo, que por fin tuvo la oportunidad de elegir a sus propios gobernantes.