Una de las fundaciones investigadas, Zagatka, fue registrada en Liechtenstein y creada por Álvaro de Orleans-Borbón, primo de Juan Carlos . Los fiscales están tratando de determinar cómo llegó la fundación a acumular su considerable riqueza y por qué movió dinero entre cuentas bancarias no declaradas.

La otra fundación, Lucum, con sede en Panamá, recibió $ 100 millones de Arabia Saudita. Los fiscales ahora están tratando de establecer si este dinero estaba relacionado de alguna manera con la adjudicación de un contrato que ganaron las empresas españolas para construir un enlace ferroviario de alta velocidad entre las ciudades saudíes de Medina y La Meca.

Como parte de la Al investigar una cuenta bancaria privada suiza en poder de Lucum, un fiscal de Ginebra, Yves Bertossa, interrogó a un abogado y administrador de fondos que tenía vínculos con Juan Carlos, así como con una excompañera, Corinna zu Sayn-Wittgenstein. El rey Juan Carlos no ha sido puesto bajo investigación en Suiza, pero su hijo, el rey Felipe, cortó lazos con Lucum después de enterarse de que había sido nombrado beneficiario del fondo.

España lanzó entonces su propia investigación, en parte basada en información compartida por el fiscal suizo sobre el gran pago realizado por Arabia Saudita a Lucum.

No está claro qué significará la partida del ex monarca para sus problemas legales. Las posibilidades de que Juan Carlos compareciera ante los tribunales de Madrid eran escasas, ya que sigue gozando de inmunidad legal.