Objetivo: Presentar seis casos de infección por Brucella en niños, Analizar las características de la enfermedad, proceso diagnóstico y terapéutico.
Método: Se analizaron retrospectivamente las manifestaciones clínicas, los resultados de las pruebas de laboratorio y el proceso diagnóstico de 6 casos confirmados de brucelosis observados entre 2011-2012 y se revisó la literatura nacional y extranjera.
Resultado: Los 6 niños tenían antecedentes de exposición, viajes a áreas endémicas o consumo de carne de cordero o res infectada. Después de los exámenes pertinentes para estos niños, se obtuvo evidencia etiológica o serológica positiva de infección por brucelosis. La principal manifestación clínica fue fiebre en todos los casos, la temperatura corporal máxima fue de 37,5-38,0 ° C en 3 casos, 38,1-39,0 ° C en 2 casos, 39,1-41 ° C en 1 caso. Excepto 1 caso cuyo tipo febril fue fiebre ondulante, todos los demás presentaron fiebre irregular, existiendo dolor articular en 3 casos, orquitis en 1 caso, linfadenopatía cervical en 3 casos, hepatoesplenomegalia en 2 casos y alteración de la función hepática en 4 casos. La prueba de aglutinación de Brucella fue positiva en 5 casos. El hemocultivo fue positivo en todos los casos. En 4 casos se utilizaron sulfametoxazol y rifampicina para el tratamiento, 1 caso fue tratado con rifampicina y eritromicina, los padres de 1 caso se negaron a utilizar el fármaco. La «brucelosis en niños» se utilizó para buscar literatura en la base de datos Wanfang, base de datos Pubmed para la literatura de los últimos 10 años, y se recuperó un total de 13 artículos, incluidos 15 casos. Todos los pacientes tenían fiebre, 6 casos tenían hinchazón y dolor articular, 10 casos tenían hepatoesplenomegalia, 6 casos tenían linfadenopatía cervical, 4 casos se complicaron con infección del sistema nervioso central. La prueba de aglutinación de Brucella fue positiva en 9 casos y el hemocultivo fue positivo para la infección por Brucella en todos los casos.
Conclusión: Las infecciones infantiles por Brucella suelen presentarse con diversas manifestaciones clínicas y, a menudo, se acompañan de síntomas de infección sistémica. Para la fiebre de origen desconocido, se deben incluir pruebas asociadas a brucelosis y prestar especial atención al diagnóstico diferencial frente a otras enfermedades.