El litio (Eskalith, Lithobid) es uno de los medicamentos más utilizados y estudiados para tratar el trastorno bipolar. El litio ayuda a reducir la gravedad y la frecuencia de la manía. También puede ayudar a aliviar o prevenir la depresión bipolar.
Los estudios demuestran que el litio puede reducir significativamente el riesgo de suicidio. El litio también ayuda a prevenir futuros episodios maníacos y depresivos. Como resultado, se puede recetar durante largos períodos de tiempo (incluso entre episodios) como terapia de mantenimiento.
El litio actúa sobre el sistema nervioso central de una persona (cerebro y médula espinal). Los médicos no saber exactamente cómo funciona el litio para estabilizar el estado de ánimo de una persona, pero se cree que ayuda a fortalecer las conexiones de las células nerviosas en las regiones del cerebro que participan en la regulación del estado de ánimo, el pensamiento y el comportamiento.
Por lo general, toma varias semanas para litio para que comience a funcionar. Su médico ordenará análisis de sangre periódicos durante su tratamiento, ya que el litio puede afectar la función renal o tiroidea. El litio funciona mejor si la cantidad de fármaco en su cuerpo se mantiene constante. Es importante que el litio el nivel en su cuerpo no sea demasiado bajo o demasiado alto. Su médico probablemente también le sugerirá que beba de ocho a 12 vasos de agua o líquidos al día durante el tratamiento y use una cantidad normal de sal en sus alimentos. Tanto la sal como los líquidos pueden afectar los niveles de litio en la sangre, por lo que es importante consumir una cantidad constante todos los días.
La dosis de litio varía entre las personas y a medida que cambian las fases de la enfermedad. Aunque el trastorno bipolar a menudo se trata con más de un medicamento, algunas personas pueden controlar su afección solo con litio.