Cómo reparar el parabrisas agrietado
Es un día hermoso. El sol brilla, el tráfico avanza con inteligencia. Pero de repente, ¡golpe! Hay un capullo de rosa del tamaño de un un cuarto de golpe en el parabrisas, directamente en su línea de visión.
No viste el proyectil que causó esto, ni yendo ni viniendo, pero a medida que los latidos de tu corazón vuelven a la normalidad, la terrible verdad lo asimila: vas a tener que cambiar el parabrisas. Esto significa lidiar con la vidriera, estar sin su automóvil por un día o dos,