Descripción general
La colitis es una inflamación o irritación del colon o del intestino grueso y, lo adivinó: comúnmente causa diarrea en nuestros amigos peludos.
La colitis puede ser aguda (lo que significa que aparece de repente) o crónica (que dura varias semanas o más, o recurrente). Hay varias causas potenciales de colitis.
Incluyen:
- Parásitos intestinales como lombrices intestinales, tricocéfalos, anquilostomas y Giardia
- Una reacción secundaria a los antibióticos y muchos otros medicamentos
- Estrés
- Pancreatitis
- Intolerancia o alergia dietética
- Indiscreción dietética, como comer pasto, garbarge, o alimentos para personas
- Infección bacteriana
- Infección viral
- Cuerpo extraño
- Enfermedad inflamatoria e intestinal irritable (EII)
- Cáncer de intestino en perros mayores
Los perros con colitis a menudo tienen sangre roja fresca y / o moco en las heces. Pueden esforzarse para defecar e ir más a menudo de lo normal. En algunos casos, su perro puede parecer estreñido y esforzarse sin producir heces. Con colitis aguda, es posible que su perro no muestre otros signos de enfermedad, excepto diarrea o esfuerzo para defecar. Con la colitis crónica, puede notar falta de apetito, pérdida de peso y letargo general.
Diagnóstico / tratamiento
Debido a que existen muchas causas potenciales de colitis, asegúrese de proporcionarle a su veterinario un historial completo de su mascota, incluidos:
- Síntomas
- Historial de viajes
- Exposición a otros perros (como ir al parque o a la guardería de perros)
- Si su mascota deambula / tiene acceso libre y sin supervisión a su jardín
- Si le pone la correa a su perro cuando camina
- Si su perro ha comido algo que no debería tiene (como un adorno navideño favorito)
- Si su perro se metió recientemente en la basura o le dieron comida a la gente
- Si recientemente cambió la comida de su perro
Si su veterinario sospecha de colitis, querrá identificar la causa subyacente.
Para hacer esto, pueden recomendar una combinación de las siguientes pruebas:
- Pruebas químicas para evaluar disfunción renal, hepática y pancreática así como los niveles de azúcar
- Un hemograma completo (CBC) para evaluar la inflamación, infección, anemia y otras condiciones relacionadas con la sangre
- Pruebas de electrolitos para asegurar que su perro no esté No está deshidratado o sufre un desequilibrio electrolítico
- Radiografías del abdomen para buscar material extraño y / u obstrucción del tracto gastrointestinal
- Ultrasonido para obtener imágenes del tracto digestivo de su perro y otros órganos abdominales importantes
- Endoscopia para evaluar el tracto intestinal
- Pruebas específicas para descartar infecciones virales, como parvovirus
- Pruebas específicas del páncreas para descartar o confirmar la pancreatitis
- Pruebas fecales
- Pruebas fecales especiales, como cultivos y pruebas de PCR
Dependiendo de la gravedad de la colitis, su perro puede ser hospitalizada para controlar mejor la diarrea. En casos menos graves, su veterinario puede darle medicamentos e instrucciones sobre cómo cuidar a su amigo de cuatro patas en casa. Es muy importante que siga cuidadosamente las instrucciones de tratamiento de su veterinario para reducir la posibilidad de que la diarrea regrese.
Prevención
Algunas de las mejores formas de mantener saludable a su mascota son come, manténgala libre de parásitos dándole preventivos mensuales y enviando sus muestras fecales a su veterinario. Además, asegúrese de que su perro esté al día con todas las vacunas recomendadas. Mantenerla alejada de la basura y otros artículos desconocidos (si son deliciosos), como la comida de las personas, y restringir su contacto con perros potencialmente enfermos en lugares públicos, como el parque y las instalaciones de alojamiento, también la protegerá de enfermarse.